El Templo del maligno diablo (TST) ha hecho una declaración en su sitio web de comprometerse a proteger el acceso al asesinato de niños por nacer, de los miembros de esa maldita secta. Luchan a favor del aborto libre.
De un lado está el bien. Están los pro-vida, que luchan a favor del derecho a la vida del niño por nacer, como Dios, la misma biología y el sentido común mandan, en una postura totalmente humanista y sana. Del otro lado está el mal. Están los pro-aborto, que luchan para que se legalice siempre el genocidio de niños en el vientre materno.
Esto queda más de manifiesto cuando en las marchas pro-vidas no hay disturbios, ni gente drogada, ni olor a marihuana o a alcohol. Suele haber rezos del Santo Rosario, imágenes de Jesucristo y de la Virgen María (Madre de Dios) y tanto católicos como protestantes se unen para cuidar el derecho a la vida. Mientras que en las marchas pro-aborto siempre las feministas y los progres intentan atacar y profanar un templo católico, en manifestaciones en donde quienes marchan suelen poseer olor a alcohol y marihuana, como así también la realización de pintadas con frases de odio hacia los hombres y hacia la cristiandad. Detrás de esas personas del pañuelo verde está el Diablo, claramente.
Marchas providas, en donde hay un ambiente totalmente sano y familiar. Fotos: Web.
Marchas pro-aborto, en donde los ambientes son para nada familiares y hay feministas locas y desnudas, que atacan y profanan templos católicos. Foto: Web.
Esto queda más en evidencia cuando el Templo Satánico (TST), luego de que se conociera que la Corte Suprema ilegalizaría el aborto, se comprometió en su sitio web oficial a cuidar el “derecho” al aborto, porque es una parte importante de su maligna religión. El mensaje manifiesta que el Templo Satánico se “opone religiosamente a muchas de las restricciones que promulgan los estados e interfieren con el acceso al aborto”, y que en nombre de los miembros de la secta satánica el TST tomará muchas medidas, porque la ilegalización del aborto violan la conciencia y las creencias de estos diabólicos.
El comunicado que han hecho los satanistas en su web oficial. Foto: Web.
En este sentido, la secta maligna reclama que el hecho de asesinar a un bebé en el vientre materno esté protegido por la “libertad religiosa”. Es que los satánicos tienen entre sus rituales asesinar bebés para ofrecerlos como parte del culto al Diablo. Es que el aborto es uno de los “sacramentos” de esa secta, como lo ha dicho su portavoz Lucien Greaves.
El caso del ex sacerdote satanista convertido a católico practicante
Hay un testimonio, muy descriptivo, que hizo público el ex-satanista Zachary King, quien aspiraba a ser Sumo Sacerdote de la maldita secta. El divulgaba el satanismo e incluso promovía los abortos como rituales satánicos. Zachary fue uno de los diez grandes brujos satanistas más poderosos, que por obra y gracia de Dios, una mujer lo hizo convertirse al catolicismo y actualmente es un católico practicante que enseña cómo vencer a Satanás.
Zachary pasó de ser un Sumo Sacerdote satánico a ser un católico practicante. Foto: Web.
Este hombre, publicó un libro que se tituló “El aborto es un sacrificio satánico”, en donde cuenta estas experiencias. Ha dicho que el trabajo de los sacerdotes satánicos es la de viajar por el mundo y hacer lo que las personas querían que hagan. Entre los involucrados hay estrellas de rock, del cine y también políticos y personas muy adineradas. “Son innumerables las personas que piden brujería y que están dispuestas a pagar lo que sea para lograrlo. No hay límites a lo que están dispuestas a pagar”, afirmó.
“Luego de cumplir 14 años, los miembros de la secta me han dicho que debía hacer un aborto. Hubo una fiesta con todos los miembros masculinos, de 12 a 15 años, y un miembro de sexo femenino de 18 años, la cual debía quedar embarazada para hacer un aborto a los 9 meses de gestación”, confesó Zachary. Luego siguió: “No sabía lo que era un aborto y me explicaron que era un bebé en el útero y que yo tenía que asesinarlo. No me dijeron que era un ‘feto’ o ‘algunas células en el cuerpo’. Me dijeron que debía matar a ese niño por nacer. Pregunté si esto era legal y me dijeron que era legal, mientras lo matara dentro del vientre se su madre”.
Esta aberración del aborto es un ritual satánico y hay que tener en cuenta que no importan las razones por el que una mujer opte por abortar a su hijo. Todos los niños abortados son ofrecidos a Satanás al final del día.
“Es que para el satanismo, el matar a alguien o la muerte de algo es la forma más eficaz de ver realizado el propio hechizo (…) matar algo es la ofrenda final a Satanás y si puedes matar a un niño en el vientre materno, es el objetivo final”, explicó Zachary.
También, Zachary explicó con más detalles: “Me acompañaban un médico y una enfermera y estaba rodeado por un círculo de 13 miembros. Estaba dentro de círculo con la mujer embarazada y el médico. Había varias mujeres arrodilladas que se mecían hacia adelante y hacia atrás y gritaban “nuestro cuerpo nos pertenece. Los miembros masculinos cantaban y “rezaban”. El ritual empezó a las 23:45hs (la hora de las brujas) y el niño murió a las 3 de la mañana (la hora del diablo)”.
“Tenía que introducir el bisturí. No tenía que matar necesariamente, sino que contaba tener sangre sobre mis manos de la mujer o el niño (…) El médico tomó al niño, lo tiró al piso, en donde las mujeres se mecían (parecían poseídas) y cuando médico lanzó al niño al piso, se lo comieron como caníbales”, detalló esta tremenda abominación. De ahí que las feministas dicen “Hoy desayuné feto”.
Feministas escribieron “Hoy desayuné feto”. Foto: Web.
Entrevista completa aquí: https://www.youtube.com/watch?time_continue=147&v=ZE5UXNkoNhw&feature=emb_logo
El aborto es un acto aberrante y satánico. No es para nada bueno. Mata a un bebé y posiblemente a la madre embarazada (quien siempre queda dañada y con secuelas físicas y mentales tras abortar). Solo Dios puede dar y quitar la vida. Lo que corresponde al ser humano es defender, con uñas y dientes, el derecho a la vida del niño por nacer y de la madre, a quien no hay que ofrecerle un aborto, sino que hay que contenerla física, mental y económicamente.
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