El comunista ex presidente peruano dio un golpe de estado fallido, fue vacado por el congreso peruano y detenido por la policía. Llegó al poder con la promesa de honestidad y se va como un corrupto.
Este miércoles, alrededor de las 12 del mediodía de Perú, Pedro Castillo (ex presidente de dicho país) anunció por cadena nacional la disolución del congreso peruano y la intervención del poder judicial. Básicamente ejecutaba un golpe de estado, que duró dos horas. Fue un intento de dictadura. Sin embargo, al no tener el apoyo de las fuerzas militares, ni mucho menos de la clase política y de la gran mayoría de peruanos, su golpe de estado fue frustrado.
Todo este intento de dictadura ejecutado por el comunista Castillo fue en el marco de una votación, anhelada por el congreso peruano, para destituírlo por incapacidad moral permanente. Es que Pedro Castillo cuenta con varias causas de corrupción, en un año y poco más de cuatro meses de presidencia. Encima de corrupto demostró ser un inepto, por disolver el congreso arbitrariamente y sin apoyo.
De este modo, el golpe de estado fue efímero y fue vacado por los asambleistas peruanos. Lo más vergonzoso es que Castillo intentó huír desde el Palacio Presidencial (con su familia, abogado y Aníbal Torres [ex primer ministro de su gobierno]) hacia la embajada de México, para fugarse de Perú hacia México y evitar ir preso. Quería irse hasta el país en donde gobierna el socialista Andrés Manuel López Obrador. Sin embargo, la Policía Nacional peruana pudo interceptarlo y fue llevado detenido.
Por todos estos escándalos, Pedro Castillo podría pasar hasta 20 años en prisión, por atentar contra el Estado y el orden constitucional. Si, un ex presidente que en campaña política prometió eliminar la corrupción del Estado peruano, termina destituído y preso por corrupción. Es muy común esto en la izquierda latinoamericana, no cumplir promesas de campaña y encima robarles a los pueblos descaradamente, para luego terminar condenados como los socialistas Cristina Kirchner, Lula da Silva y Rafael Correa, por mencionar algunos de los ex presidentes de la región.
La cuestión es que las causas de corrupción se dan frecuentemente en gobiernos de izquierda, del socialismo del siglo XXI. Esto es porque la izquierda busca agrandar el Estado y por ende los políticos socialistas tienen más dinero de los pueblos para administrar, y en eso ocurren los diferentes actos de corrupción. Todos los promotores del Foro de Sao Paulo están implicados en alguna causa de corrupción.
La izquierda siempre da un discurso que encanta a quienes son ignorantes en la política, con términos como "redistribución de la riqueza", "ascenso social", "justicia social", que lamentablemente varias personas pobres lo compran. Sin embargo, luego se llevan la decepción y siempre los socialistas y comunistas intentarán imponer un gobierno autoritario o una dictadura (como intentó Castillo en este caso). Políticos que intentan perpetuarse en el poder y hacerse ricos a costa de la pobreza de los pueblos.
La reemplazante de Castillo
Quién asume como jefa de estado de Perú es la vicepresidente de Pedro Castillo, Dina Boluarte, quién es una mujer de la misma ideología política del ex mandatario (comunista).
Más allá de que Boluarte al asumir como nueva presidente de Perú llamó a la unidad nacional y a poder incorporar a los partidos opositores al gobierno, lo cierto es que ella también es cómplice y forma parte de la corrupción del castillismo, por lo que si el congreso se lo propone también podría vacarla. De hecho, no tiene el apoyo de los asambleístas peruanos.
Lo peor es que ella se propone a completar el mandato de Pedro Castillo y no a llamar a nuevas elecciones, como debería en este caso debido al gran escándalo y para calmar la tensión social que se vive en el país incaico.
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